SISMO | El acto recordó una década del terremoto que cobró la vida a 10 personas, la mayoría embarcada junto al alcalde de Aysén en el estrecho canal de agua de más de 70 km.

            Con un toque de sirena a las 13:45 horas, justo a la hora en que hace una década ocurrió el fuerte terremoto y tsunami del 21 de abril de 2007, que cobró la vida de 10 ayseninos, se dio inicio a una ceremonia religiosa de reflexión y recuerdo en el cementerio de Puerto Aysén.

Las familias de las víctimas de este evento natural, autoridades, amigos y la comunidad acompañaron la actividad que se llevó a cabo a los pies del monolito construido en memoria de quienes fallecieron hace 10 años en el litoral de nuestra región.

 

José Barría, sacerdote que dirigió la ceremonia y tío de uno de los jóvenes que perdió la vida en el fiordo Aysén, Miguel Ángel Silva Barría, dijo que la fe en Dios es lo que ayuda a sobrellevar el dolor de perder a un ser querido.

“Paso a paso Dios va a entregando la paz, que no es una resignación solo para tranquilizarse, sino que una resignación cristiana, donde uno encuentra la fuerza de Dios que lo ayuda a seguir adelante, a cargar la cruz, a descubrir que su gente está en el cielo y todos los días los está ayudando. Nosotros estamos llamados a ser seres espirituales y creer en Cristo resucitado, entonces, todas esas cosas hoy día se juntan, la fe, la tristeza y la esperanza”.

Rubén Contreras, sobreviviente de la tragedia y quien perdió a sus padres, hermana y sobrino a raíz del fuerte evento natural, manifestó que es una fecha imposible de olvidar.

“Uno trata de cerrar el ciclo pero es imposible, porque yo lo viví, me ha costado mucho superarlo, trato día a día de hacer lo posible para estar bien. En esta ocasión, agradecer a las autoridades y a todos quienes nos acompañaron, porque seguimos recordando a nuestros familiares y la idea es que nadie se olvide”.

Este sábado, se espera realizar un recorrido al fiordo Aysén, donde participarán las familias de las víctimas y autoridades.